domingo, septiembre 18, 2011

Capos en el Capitolio: más bloqueo y fondos para la subversión


Hace pocos días resumíamos la ola de iniciativas  anticubanas procedentes de una mafia al asedio desde el Capitolio de Estados Unidos, empeñada en aplicar a Cuba la fórmula libia, o al menos mantener al país en el circuito internacional del arsenal de las mentiras, la difamación y el descrédito, tratando de ablandar a la opinión pública global de cara a un presunto empleo de las tropas, como le exigió al Presidente Obama, la presidenta del Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representante, Ileana Ros-Lehtinen.

Pudiera pensarse en un escape casual de soberbia o quizá una muestra de impotencia, cuando Ileana Ros y Mario Díaz Balart no descartaron el uso de la fuerza militar contra Cuba, pero lo real y peligroso es que su ofensiva oportunista no descarta ninguna opción.



Cuando se vino abajo el campo socialista promovieron “la hora final”; en medio de las revueltas internacionales actuales mueven todos los hilos posibles para incrementar el bloqueo, obstaculizar cualquier interés estadounidense en la economía cubana y lograr obtener la mayor cantidad de dinero posible para la guerra contra Cuba.

Poner los fondos de Cuba congelados en EE.UU. en manos de mercenarios y terroristas, es una práctica tan fascistoide como la aplicada en Libia por Washington y la OTAN. Pero no menos hitlerianas son las amenazas de Bob Menéndez y Marco Rubio de bloquear todas las designaciones para puestos de embajador u otros cargos de política exterior que requirieran ratificación del Senado, hasta que la Casa Blanca no ejerciera real presión para que fueran “descongelados” los 20 millones de dólares y otros fondos destinados para la subversión contra Cuba.

Los mercenarios de allá y aquí se afilan los dientes para vacilar lo que les toque del deshielo, principalmente los capos del Capitolio que reparten y se quedan con la mayor parte. Mientras en marchas y premios se distribuyen otras partidas para los líderes virtuales de las revueltas locales.

Damas y caballeros de la guerra callejera y el ciberespacio, que provocan los domingos y salen de compra los lunes, mientras los que reparten aquí -protagonistas mediáticos por excelencia- incrementan sus cuentas allá, con vistas al futuro. Algún día se sabrá a cuánto ascienden las tarjetas doradas de Marta Beatriz Roque, Elizardo y Yoani Sánchez, que cobran por las nóminas de la mafia, de la USAID y sus sucursales, de otras almas caritativas y de la Sección de Intereses de los EE.UU.

Mientras el dinero de la guerra se reparte, Ileana Ros y David Rivera presionan a la administración Obama  para que implemente cuanta medida sea necesaria para frenar la explotación petrolera en la isla, con el pretexto de representar un riesgo ecológico para las costas estadounidenses, pero sobre todo por lo que representaría económicamente para Cuba.

En mayo Ros-Lehtinen presentó durante dos sesiones seguidas un proyecto legislativo que busca prohibir la entrada a EEUU de cualquier directivo o firma extranjera que sea propietario o controle acciones en una compañía que haya hecho una inversión de un millón o más de dólares en una operación energética en Cuba.  El proyecto de Ley también convertiría en ilegal que cualquier ciudadano estadounidense invierta o trabaje en un proyecto de perforación cubano.

El Departamento del Tesoro es blanco de las más fuertes presiones de los últimos años por parte de los congresistas anticubanos que se encargan de la persecución por cuenta propia de las posibles fisuras que pudiera tener el cruento bloqueo que se nos aplica por las entidades especializadas en el control de la efectividad de esa criminal arma.

Al asumir como presidenta del Comité de Relaciones Exteriores una de las primeras acciones de la Ros fue amenazar a la ONU con revisar cómo se utiliza los fondos que EE.UU. le otorga.

Coincidentemente, despachos noticiosos comunicaban que el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) había informado a Cuba sobre el congelamiento de 4.2 millones de dólares que el Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA y la Tuberculosis había destinado para el primer trimestre del presente año.

Quienes han vivido de la filosofía de la guerra e hicieron fortuna del sufrimiento de su pueblo, difícilmente les importe el SIDA o la Tuberculosis. Ayer prefirieron y defendieron las bombas en los hoteles, hoy hablan de tropas de la OTAN

No hay comentarios: