sábado, febrero 23, 2013

Yoani Sánchez, una agente de la CIA con mala memoria

Por M.H. Lagarde
Tomado de Cambios en Cuba

De acuerdo con El Nuevo Herald, la autora del blog “Generación Y”, la bloguera mercenaria Yoani Sánchez, visitó el Memorial de la Resistencia, ubicado en la antigua sede del Departamento de Orden Político y Social de Sao Paulo, el organismo de control y represión política durante el régimen militar brasileño (1964-1985).

Después de la visita la bloguera cubana aseguró que en el museo “está ejemplificada la resistencia de un pueblo que pasó por una dictadura”. “Quedé impresionada, solidarizada, me acordé de la lucha en Cuba”, dijo Sánchez, y manifestó su esperanza de que un día pueda haber un museo parecido en la isla caribeña.


Me pregunto si ninguno de los guías que la acompañaron al museo le explicó en algún momento a Yoani Sánchez la historia de la dictadura militar brasileña. Al parecer, no. No obstante, la bloguera, que según ha declarado en Brasil cuenta con una internet de velocidad increible, bien pudo hacer un receso en su parloteo ignorante y tomarse el trabajo de realizar una búsqueda en Wikipedia sobre el tema.

En esa enciclopedia en red la bloguera se hubiera enterado que en 1964 en Brasil tuvo lugar un Golpe de Estado contra el presidente João Goulart por parte de militares brasileños con el apoyo del gobierno de los Estados Unidos. Y que entre las causas del golpe estuvo la campaña que los medios de comunicación hicieron para convencer a las personas que Goulart llevaría Brasil a un gobierno similar al de la Unión Soviética y de la República Popular China, es decir, comunista.

"Los propietarios de tierras -dice también Wikipedia-, y los empresarios también deseaban el control de la crisis económica. El temor de "izquierdización" era compartido por Estados Unidos, siendo que el gobierno estadounidense ofreció apoyo logístico de su flota naval en el Océano Atlántico para auxiliar a los golpistas en caso de que se precipitase una resistencia armada de Goulart o sus aliados contra el golpe. La noticia del golpe fue recibida con alivio por el gobierno de Washington, satisfecho por saber que Brasil no seguiría el mismo camino de Cuba".

Los medios de prensa de entonces aseguraban "lo que es bueno para los Estados Unidos es Bueno para Brasil", consigna que recuerda a las palabras de la bloguera poco después de su llegada a esa nación: "para reestablecer relaciones con Estados Unidos, Cuba debe optar por un modelo de democracia exigido por Washington y otros países".

La también filóloga debió indagar igualmente sobre la Operación Condor, nombre que recibió la trasnacional del crimen apoyada por la CIA que funcionó en varios países de América Latina durante la década del 70 y principios de los 80 del pasado siglo y saber que en Brasil, hasta el momento, según la Comisión de la Verdad, existe un registro de 400 personas que siguen desaparecidas y se investigan otros 170 casos. Se desconoce el número de muertos y de torturados.

 La gran mayoría de las víctimas de la dictadura militar eran militantes comunistas pertenecientes a los mismos partidos que hoy se oponen a la visita de la bloguera a Brasil, y a quienes la mercenaria cubana, para estar a tono con el nuevo manual de la represión editado en Washington, llama terroristas.

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