sábado, abril 09, 2016

Para que nunca dejen de brotar





Por Yenisé Pérez Ramírez
Fotos: Osmany Castro Benítez y Jesús María Rivera Pérez
Tomado de Victoria Facebook

Lo que hace unos siglos atrás constituyera uno de los principales atractivos de esta pequeña isla yace hoy como parte de la memoria colectiva y las referencias históricas. Sin embargo, existen por ahí personas determinadas a hacerlo resurgir.

Las aguas minero-medicinales de Santa Fe, como fueran conocidas por muchos años, representaron en su momento además de una vía alternativa a la medicina tradicional, un puente para el acercamiento de todos los cubanos con este pedacito de tierra. 


AGUA PASADA

Cuentan los más viejos que con un bañito en las aguas de manantial podías curar problemas de todo tipo: oftalmológicos, artritis, artrosis, enfermedades de tipo dermatológicas, respiratorias e incluso digestivas. Eso sin contar la sensación de limpiar el cuerpo por dentro y por fuera con el líquido más puro que la tierra podía ofrecer.

Ojitos de Santa Lucía, La Magnesia, Santa Rita, El Hierro y El Respiro, cualquiera de estos grifos naturales a pesar de sus características diferentes, hacían las delicias de sus visitantes, mas en la actualidad, solo son sinónimo de contaminación y decadencia. 

Las propiedades sulfurosas, ferruginosas y magnesianas, antaño cobijo para quienes llegaban buscando sanar sus dolencias se fusionan ahora con las aguas residuales y los desechos tirados al viento sin conciencia del daño ocasionado al ambiente y a nuestra salud. 

Pero como la historia cambia y con ella nuestro pensamiento, la necesidad de rescatar uno de los símbolos pineros más antiguos y con esto sanear de paso nuestro entorno, ha llevado a los directivos municipales de la Empresa Integral de Recursos Hidráulicos (HidroIsla) a elaborar un proyecto de acción conjunta con la Organización No Gubernamental (ONG) del norte de Francia Energía Solidaridad con Cuba-Isla de la Juventud.

Claro, los proyectos no se llevan a cabo de la noche a la mañana, razón por la cual este, nombrado “Rehabilitación del sistema de saneamiento de los líquidos residuales y para la mejora de las condiciones higiénico-sanitarias en La Fe, IJV-CUBA” transcurrirá en un plazo de tres años.
He aquí el dato más importante: el tiempo de implementación; porque como cubanos al fin al escuchar hablar de planes estamos a la espera de un resultado inmediato, cuando se trata de un trabajo mucho más complejo de lo imaginado.

TÉRMINOS DE REFERENCIA

La recuperación de los manantiales de La Fe no son más que una consecuencia lógica de los diseños previstos, el más importante propósito formulado por sus creadores es potenciar una mejor calidad de vida de los santafeseños a partir del eficaz tratamiento y evacuación de los residuales, especialmente en tiempos donde las amenazas epidemiológicas son una constante.

Durante el primer año, según explicó el codirector por la parte cubana, el ingeniero Jesús María Rivera Pérez, director técnico de HidroIsla, las labores se centrarán en estudios de investigación hidrogeológicos, levantamientos y confección de planos topográficos que permitan la localización e identificación de los puntos contaminantes de los manantiales y zonas aledañas, así como explorar el área de inundación de la presa de Santa Fe que afecta a los mismos.

En un segundo momento se establecerá un plan de acciones que incluirá la dirección de flujos subterráneos, la solución de la evacuación de las aguas pluviales actualmente vertidas en el arroyo Agua Santa y la determinación de las zonas de protección de los manantiales.

El tercer momento del proyecto está encaminado a concretar las medidas establecidas, específicamente aquellas relacionadas a la conexión de las viviendas del Reparto Camilo Cienfuegos y el poblado Cochabamba al sistema de alcantarillado y el correcto mantenimiento a este.

UNA MANO LAVA LA OTRA…..

Aun cuando el interés de mejorar las condiciones de vida de cada uno de sus habitantes es una prioridad del Gobierno revolucionario cubano, las condiciones -económicas sobre todo-no siempre están al alcance.
Es aquí donde entran a jugar un rol muy importante las diversas organizaciones altruistas extranjeras, posibilitando llevar a cabo sueños guardados en una gaveta.

Este es el caso de la ONG Energía Solidaridad con Cuba-Isla de la Juventud, vinculada anteriormente al municipio, en especial con la Empresa Eléctrica en la realización de obras colectivas en favor del bienestar social.

Y aunque esto del bienestar social pudiera sentirse lejano, la realidad desconocida por muchos en datos numéricos es que entre los pobladores de Camilo Cienfuegos y Cochabamba se beneficiarían 13 530 personas, de ellos 2 076 niños, 4 736 mujeres y 1 218 ancianos; sin mencionar que la recuperación de los manantiales favorecería a los 84834 pobladores de la Isla y a todo aquel interesado en visitarla.

Pero como bien dije al principio de este subtítulo, una mano lava la otra, por ende no todo puede quedar a merced de otros, toca también a los actores sociales más interesados hacer su papel: fortalecer la educación ambiental en aras de desarrollar destrezas, conocimientos, valores y experiencias que capaciten el actuar individual y colectivo en esa gran obra que es proteger el medio ambiente y el entorno que nos rodea.

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